CARTA N° 46: 26/04/11
FOTOGRAFÍAS Y CINEMATOGRAFÍAS
Una fotografía registra un instante de la realidad. Una cinematografía registra un proceso, una construcción histórica.
Esto es así, siempre y cuando sean registros de buena fe. Con otras intencionalidades esos registros pueden ser distorsionados con tecnologías actuales,
Allá por los años 70, un querido amigo tuvo que hacerse cargo de la dirección de un hospital en una zona rural de un Departamento lejano. La población estaba dispersa y las dificultades para acceder al hospital eran muchas.
Existían cuatro postas sanitarias periféricas, de las cuales sólo dos se hallaban habilitadas. En 40 parajes funcionaban escuelas primarias.
Mi amigo decidió como estrategia, procurar la instalación de una posta en cada escuela.
Al cabo de un año y medio, 22 parajes contaban con postas sanitarias, gracias a la movilización de trabajadoras y trabajadores que organizaron cursos para promotores, adecuaron edificios y gestionaron equipamientos.
Un grupo de jóvenes pertenecientes a una institución de la capital del país, llegaron para un campamento con el propósito de pintar y reparar pupitres de una de las escuela del paraje que llamaremos “Las Flores Chicas”, uno de los 18 que aun no tenía posta sanitaria.
Al cabo de una semana emprenden el regreso y visitan a mi amigo: “Estuvimos en “Las Flores Chicas”, no hay Promotor de Salud ni posta…”
Describían la fotografía tal cual era la situación en ese paraje: no se contaba con promotor ni con posta.
¿Cómo siguió el comentario?
“¡Es una vergüenza… el Estado no hace nada, ustedes no hacen nada!”
Mi amigo intentó sin éxito contar la película, la historia de lo que estaba pasando de hacía un año y medio.
La institución capitalina que había auspiciado el viaje de los jóvenes redactó una nota de prensa con virulentas críticas a la “inacción del Estado en todo el Departamento”.
Cualquier semejanza con algún artículo periodístico, noticioso en la TV o comentario que se escuche por allí en la actualidad, no es para nada casualidad.
Muy necesarias y útiles son las fotografías para constatar realidades y señalar aspectos faltantes que siempre hay.
Lo constructivo es complementar esa constatación, conociendo también la cinematografía, es decir, la historia de lo que está ocurriendo, y de esta manera aportar y acompañar.
Este breve relato de fotografías y cinematografías pretende ayudar a reflexionar acerca de dos opciones.
Una de ellas juzga y opina por la fotografía del momento, adjudica culpas, señala quiénes tienen que hacer y emite declaraciones, a menudo en un tono iracundo que se emparenta con la prensa sensacionalista.
La otra opción nace de una actitud alegrémica. Se ocupa de conocer también la película, el proceso histórico. De esta manera se generan sugerencias y entusiasmos constructivos para suplir las falencias, ya que permite valorar lo avanzado.
Si se trata de una situación que se deba denunciar, lo hace con responsabilidad.
Si se hace necesario formular una protesta, la hace siempre junto con una propuesta, con el compromiso de acompañar y de saberse perteneciente a la misma.
Esta opción es la que sentipensamos en la cotidianeidad de ese Otro Mundo Saludable que ya está.
Hasta la victoria de la Vida siempre!
Julio