Carta 70: 22/02/12
PODER, ANTROPOCENTRISMO Y BIOCENTRISMO
Tres muy queridos amigos nos han hecho llegar diversos sentipensares que nos han motivado a retomar el tema del “poder”
Alberto Valente, ciclista, poeta, actor, laicrimpero (1) y que también trabaja como odontólogo, nos dice:
“¿No habrá que desaprender lo que es poder? Siempre lo usamos como control y dominio donde somos centro. Si somos parte de un todo que nos contiene, el poder para serlo es Servicio. Bien podrían tenerlo en cuenta nuestros políticos contemporáneos. ¿Y vivir con alegremia no es sinónimo de vivir poéticamente, donde alegría y asombro copulan para transitar en el nacimiento y la creación?
Promovemos la revolución del cambio de paradigma cultural, del antropocentrismo al biocentrismo, convencidos que es indispensable para la continuidad de la vida humana en el Planeta.
La reflexión de Alberto nos moviliza a intentar identificar las características del poder en una cultura y en la otra.
Recientemente, Javier Segura del Pozo, prestigioso salubrista español, nos hace llegar un libro editado en 1940, titulado “Así quiero ser”, el cual contiene lecturas del ideario falangista para niños.
Veamos algunos de sus párrafos que nos muestran la concepción del poder del antropocentrismo en una de sus expresiones más extremas:
“Es necesario que en toda nación haya un orden, una disciplina, una Ley, uno que mande y otros que obedezcan”.
“A la cabeza y como Jefe hay un Caudillo; un conductor al cual estamos todos obligados a obedecer”.
“Tenemos la obligación de acostumbrarnos a la santa obediencia…”
“En mi casa manda mi padre; en la escuela, el maestro; en el pueblo el Alcalde; en la Provincia, el Gobernador; en España, el Caudillo.”
“España es un estado totalitario: un solo jefe, un solo mando, una sola obediencia”.
Con un gran sentido de responsabilidad histórica, Javier expresa “los más jóvenes entenderéis lo que hemos sufrido los que nos educamos bajo el franquismo…”
Esta concepción antropocéntrica totalitaria, contrasta fuertemente con otras maneras de entender el poder, que son signos de otro paradigma.
Una de ellas es el respeto a la pluralidad, como lo expresa la Constitución del Estado Plurinacional de Bolivia:
“El Estado asume y promueve como principios ético-morales de la sociedad plural: ama qhilla, ama llulla, ama suwa (no seas flojo, no seas mentiroso ni seas ladrón), suma qamaña (vivir bien), ñandereko (vida armoniosa), teko kavi (vida buena), ivi maraei (tierra sin mal) y qhapaj ñan (camino o vida noble).”
Comparto un fluir de sentipensares sobre algunas características del “Poder” en ambos paradigmas culturales:
Poder antropocéntrico
|
Poder biocéntrico
|
· Ordena
· Controla
· Maneja
· Acumula
· Explota
· Compite
· Individualista
· Corporativo
|
· Acompaña
· Sirve
· Apoya
· Comparte
· Construye
· Coopera
· Comunitario
· Socializado
|
Roberto Zaldúa, amigo laicrimpero, amante de la plantas y que trabaja como médico naturista, nos da su visión sobre cómo ejercer el poder:
“No se trata de combatir a estos monstruos sino de reconocer más y más la Vida en cada lugar, en cada persona, en cada grupo... La Vida, como el hilito del collar uniendo casi imperceptiblemente para que todos sean uno. Ese será nuestro poder...”
Hasta la Victoria de la Vida Siempre!!
Julio
(1) “Laicrimpero”, “Laicrimpera”: gentilicio acuñado para definir a personas que son participantes asiduas de los Encuentros de Salud Popular “Laicrimpo”