Carta 78: 09/05/12
NO EXISTEN RECURSOS HUMANOS
En nuestra Carta anterior decíamos que llamar a toda forma de vida “recurso natural” es una de las tantas manera de ser colonizados mentalmente.
Lectoras y lectores nos han hecho llegar diversas opiniones, muchas de las cuales nos exhortan a reflexionar sobre la explotación de las personas. Para ello invitamos a “ver” una obra teatral.
Nombre de la Obra: No existen recursos humanos
Personajes:
Aurelio, Gerente
Belisario, Jefe de Departamento
Clemente, empleado, “Legajo Nª 5”
Escena 1:
Aurelio prende la computadora, hace click en el organigrama.
Observa que en la Sección A tienen cinco empleados y en la B, tres.
Escena 2:
Aurelio llama ala Sección A:. “Envíeme ‘al N° 5’ a la sección B”.
Belisario siente que le quitan poder. Se resiste. La orden es terminante.
“Esto es una máquina, en la B falta un engranaje”.
Escena 3:
Belisario ordena “al N° 5” que se vaya a la sección B..
“El número 5” se llama Clemente. Es un trabajador que ama lo que hace,
propone y lleva adelante numerosas iniciativas.
Clemente no oculta su sorpresa…
"Pero Jefe, aquí estamos trabajando juntos en equipo en un proyecto… nos entendemos bien”.
“Mire…, le responde Belisario, no piense nada. Ud es un engranaje. La máquina tiene que funcionar.
Vaya a la sección B de inmediato!”
Clemente tiene que obedecer pero se atreve a espetarle:
“Yo soy una persona que siento y pienso. No soy un engranaje”.
Esta obra con personajes de ficción y lenguaje imaginado, se la vive en la realidad con diversos matices, y a veces muy edulcorado en los más variados escenarios; empresas públicas o privadas, hospitales, escuelas, universidades, instituciones bancarias, fábricas, comercios, organizaciones no gubernamentales y muchas otras.
Otras veces se usa la expresión “Ud. es un soldadito, tiene que ir donde lo manden…”, y en otras ocasiones “Ud. es una pieza de ajedrez…”
Concepción maquinista, castrense y de instrumentación, van de la mano en el paradigma de la cultura antropocéntrica.
El capitalismo surgido de esa cultura, impone la impronta del utilitarismo en su lenguaje.
Por la instrumentalización de las personas, por las sutiles maneras de dominación, nos oponemos a la nominación “Recursos Humanos”.
Hablar de “Recurso humano”, que sea un ítem a llenar obligatoriamente en todo proyecto o programa, nos coloniza haciendo que percibamos a las personas como objetos descartables, y volvamos esta percepción parte natural del paisaje.
En reiteradas oportunidades compartimos el sueño de un mundo donde el trabajo sea arte creativo y cooperativo. La minga andina es una buena imagen de ello. Otro Mundo Saludable es posible, está y siempre ha estado desafiando los poderes de la cultura hegemónica.
Saludamos la resistencia activa de los que aman la vida… Y la Vida siempre se abre paso.
Hasta la Victoria de la Vida siempre!!
Julio