Carta 128: 15/05/14
CUIDAR LAS GENERACIONES FUTURAS-IV
Necesidades Presentes
Decíamos en la Carta anterior que el artículo 41º de la Constitución de la Nación Argentina, al establecer “que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras”, induce a preguntarnos cuáles son realmente esas necesidades y cómo proceder para que las acciones que realicemos para satisfacerlas no afecten las generaciones por venir.
¿Necesidades para qué?
Nos parece que tendríamos que responder primero a esta pregunta.
Desde nuestro punto de vista, debemos satisfacer necesidades para vivir y para vivir en felicidad.
Nuestro concepto de felicidad es vivir con Alegremia cada vez mayor, es decir, con alegría creciente circulando por nuestro torrente circulatorio.
Para ello se requiere, siempre según nuestra visión de la vida, satisfacer las NVI, Necesidades Vitales Indispensables: Aire, Agua, Alimento, Albergue/Abrigo, Amor, Arte y Aprendizaje.
De todas ellas, sólo dos “A”, Alimento y Albergue/Abrigo, requieren actividades humanas de las llamadas “productivas”.
Producir Alimentos saludables es posible. La Agroecología y la Agricultura Natural propuesta por Fukuoka, lo demuestran.
Producción de Alimentos para alimentar y no para lucrar, como es el caso de los “Agronegocios”, que usan químicos y organismos genéticamente modificados, sin considerar el bienestar de las generaciones futuras.
Albergue construido en armonía con el paisaje, tal como nos enseña la milenaria sabiduría andina.
Lo mismo en cuanto al Abrigo, elaborando prendas de vestir producidas en el ámbito local, sin afectar la vida de la flora y de la fauna.
La A del Aprendizaje nos guía a desaprender y de esta manera, reencontrar la Sabiduría para que nuestro hacer siempre sea amoroso con la Naturaleza a la cual pertenecemos.
Somos conscientes que hay otros conceptos de felicidad.
Sin ir muy lejos, aquí en Argentina hace unos años, en plena crisis neoliberal que sumió a millones de personas en la pobreza, un Ministro de Economía públicamente expresó que no podía vivir con menos de 10.000 dólares mensuales.
Para otros, seguramente para muy pocos, la cifra ha de ser mucho más abultada. Sabemos de personas que poseen fortunas valuadas en cifras que no alcanzamos a imaginar,
El sistema imperante permite y alienta desigualdades demanera escandalosa. No tiene en cuenta las generaciones futuras, ya que para satisfacer esa voracidad de acumulación agrede al Planeta con actividades extractivas, combustión de hidrocarburos y deforestación, entre otras.
Pensar en las generaciones futuras parecería que nos da las pautas de cuáles deben ser las actividades productivas y de cuál debe ser su propósito..
Creemos que en la Humanidad está naturalmente el amor a las generaciones futuras.
Para que ese amor sea concreto, necesitamos un cambio cultural. Dejar de una vez por todas, el antropocentrismo que nos lleva al consumismo y de allí inexorablemente a la extinción, y recuperar el sentimiento de pertenencia a la Vida, a la Naturaleza.
hasta la Victoria de la Vida Siempre!!
Julio