Carta 212: 31/03/16

¿ESTADO EMPRESA?

       “Si pasa en una empresa, se funde”, expresó la Vice Presidenta de mi país, justificando el despido de miles de trabajadoras y trabajadores del Estado.

      Sin desconocer que se desmantelan selectivamente ciertas áreas y sin dejar de advertir la notoria persecución ideológica, como viejo gremialista, siento la obligación de compartir con las lectoras y los lectores algunas reflexiones que me motivaron la expresión que denota la concepción del “Estado como Empresa”.

      En la década del 60 del siglo pasado, compañeras y compañeros de diferentes ideologías militábamos en ese entonces en el Colegio Médico de Punilla (Córdoba, Argentina).

      Liderados intelectualmente por el Dr. José Herrou Baigorri, coincidíamos en sostener que cuando ocurre el quiebre de la salud, ni el enfermo ni su familia, deberían gastar nada.

      Promovíamos  con entusiasmo un Sistema Único de Salud financiado por Rentas Generales con cobertura y accesibilidad universal.

      Con agresividad había quienes nos espetaban: “Que la Salud es un Derecho… ¿quién lo dijo? La salud es un servicio que tiene que pagarlo quien lo consuma”.

      Otros críticos nos señalaban con cierto dejo peyorativo que eso era el “Estado de Bienestar” y no faltaban otros que nos rotulaban como “populistas”

      Nosotros hablábamos del Estado Solidario. No cabe en su concepción cerrar ramales ferroviarios dejando poblaciones aisladas,  cerrar escuelas por matrículas bajas, ni dejar de suministrar servicios.

      El Estado Solidario funciona con otra lógica, con la lógica del servicio, de la justicia social y de la equidad distributiva.

      Hace unos años, en un encuentro internacional, un profesional que se presentó como “socialista” me sorprendió la manera que entendía su país.

      “No es justo, me decía, que nosotros que vivimos en “el sur”, donde están radicadas grandes industrias y contribuye sustantivamente al Producto Bruto Interno, tenemos que mantener “el norte” pobre. ¡Tenemos que independizarnos y que “el norte” se arregle solo!”

      A pesar de su declamado “socialismo”, tenía mentalidad de medir todo monetariamente y cuando se cae en esa forma de pensar, el individualismo y el egoísmo destruye al ser humano como tal.

      No… El Estado no es una empresa. La empresa tiene como objetivo excluyente la rentabilidad.

      El Estado está conformado por seres humanos, familias, comunidades, con rostro, nombre y apellido que tienen el Derecho a la Vida, tal cual lo establece la Declaración Universal de Derechos Humanos.

      La Declaración Universal de Derechos Humanos, así como otras Declaraciones, Convenciones y Pactos, han sido incorporados al texto de nuestra Constitución Nacional  (Art. 75, inciso 22).

      Soñamos con las Repúblicas Unidas de la Humanidad, en donde el lema del reciente 12° Congresso de Redeunida, celebrado en Campo Grande, Mato Grosso do Sul, Brasil, sea una realidad:

"Diferencia Sí, Desigualdad No:

La pluralidad es la invención de la vida"

      El Estado Solidario es el apoyo mutuo organizado.

                                    Hasta la Victoria de la Vida Siempre!

                                                                                                  Julio