Carta 251: 05/01/17

CONSTRUIR CON LA DIVERSIDAD

Una de las características del Antropocentrismo, la cultura aun dominante, es el autoritarismo patriarcal que lleva  a rechazar toda diferencia.

Rechaza con reacciones iracundas y agresivas, asume actitudes de desconfianza que llevan a ponerse a la defensiva, o con indiferencia que menosprecia.

En el Antropocentrismo, que alguna vez llamamos “cultura de muerte”, la diversidad es motivo de separación y destrucción.

Por el contrario, en el Biocentrismo, que tiene la Vida como centro, con la consciencia que somos vida dentro de la Vida, la diversidad es motivo de unión, enriquecimiento, construcción y complementariedad.

Al Biocentrismo lo llamamos “Cultura de la Vida”. La “Cultura de la Vida” comprende que somos singulares, con historias propias que hacen que percibamos el mundo desde distintos puntos.  De allí que tengamos diversas interpretaciones del instante que vivimos. Es lo que se llama habitualmente “puntos de vista”.

En este instante de la Historia de la Humanidad, coexisten las dos culturas y creemos que coexisten en el interior de cada ser humano.

Situándonos en el Antropocentrismo, la tendencia es el pensamiento único, enojándonos cuando nos expresan puntos de vista diferentes, sintiéndonos dueños de una verdad absoluta estamos a un paso de caer en el fanatismo dogmático.

En tanto, situándonos en el Biocentrismo, la multiplicidad de puntos de vista es asumida como oportunidad para desarrollar nuevas ideas y desarrollarnos como seres humanos.  Se expresan y se escuchan las diferencias con una actitud de diálogo, lo cual significa estar dispuestos a modificar opiniones propias.

Sentipensamos que lo más profundo es el cambio cultural. Una re-evolución de la Humanidad que se vaya desarrollando en cada Ser, dejando el Antropocentrismo y abrazando el Biocentrismo.

          ¡Hasta la Victoria de la Vida Siempre!!

                                                                    Julio