iCarta 307: 13/03/18

JARDÍN INTERIOR

        Nuestro amigo, el  joven artista Gabriel  Atadell, de la Ciudad de Buenos Aires, nos ha enviado su obra “El Árbol de los Druidas”, pensando en un jardín interior.  Los Druidas eran los sacerdotes celtas que tenían el roble como Árbol Sagrado.

        “Representa ese jardín interno que cada uno va plantando y cuidando, regando con mucho cariño y amor. Dejar fluir la esencia de uno, para que crezca y se expanda con sus ramas y se afiance con la fortaleza de sus raíces para que uno sepa de donde vino y nunca se pierda”, nos dice Gabriel.

        Estamos convencidos que todo ser humano tiene su niña o su niño en su jardín interior… Sentipensamos que hallarlo es lo más trascendental, es volver a sentirnos Naturaleza, recuperar el sentido de pertenencia a la Vida y recordar que el Amor es lo esencial. Re-Cordar es volver a pasar por el corazón.

        Al haber adquirido la cultura antropocéntrica, el ser humano se atribuye ser el centro del Universo. Esto nos ha llevado a  vergonzosas injusticias sociales y a insensatas agresiones a la Madre Tierra.

La continuidad de la vida de la Humanidad requiere el abandono del antropocentrismo.

Conscientes de la crisis global que padecemos, es urgente recuperar el sentido de pertenencia a la Madre Tierra, a sentirnos vida dentro de la Vida. ¡Abrazar el Biocentrismo!

Esto sólo será posible si cambiamos interiormente.

        El Arte nos lleva viajar por nuestro Jardín Interior, reencontrándonos con la niña o el niño que somos.

¡Hasta la Victoria de la Vida Siempre!

Julio