Durante el desarrollo de la “Conferencia Mundial de los Pueblos por el Cambio Climático y los Derechos de la Madre Tierra”, en Cochabamba (2010). participamos de ceremonias ancestrales pidiendo permiso y protección a la Madre Tierra para trabajar en esta Asamblea que nos hablan de la vigencia de la dimensión espiritual que tanta esperanza nos da.
Tras más de 500 años de opresión, dominación, imposición de la cultura del individualismo, el consumismo y el desprecio a toda forma de vida, ESTÁN PRESENTES los valores, los saberes y haceres de los Pueblos Originarios.
Un milagro que nos da Esperanza y nos genera entusiasmos.