Competir a compartir
-Te corro una carrera
-Hasta donde?
-Hasta el pié de la montaña
- Donde está el sauce llorón?
-Si, me adivinaste el pensamiento, dijo Susi, mientras se agachaba como para tomar envión.
-Vamos, respondió Roberto haciendo el mismo gesto
Salieron sin mirarse, solo veían la meta del sauce al pié de la montaña. Detrás de ella un nubarrón dejó paso a la luz solar.
Tenuemente se hizo ver un arco iris, Susi y Roberto, comenzaron a divisarlo, alzaron la vista, y sin saber porqué su carrera se hizo más lenta, el arco iris aumentaba su intensidad.
Frenaron su carrera, algo extraño pasaba, se miraron, parecía la primera vez que lo hacían, un escalofrío corrió por sus cuerpos, percibieron el roce de la piel de sus manos.
Se estaban despidiendo de la niñez…
Alberto Valente
valentealberto@fibertel.com.ar