La Gacetilla Alegrémica » Nro. 297 - La Amazonía es Mujer - 22/10/19
Última actualización: 21/10/2019
LA GACETILLA ALEGRÉMICA
Publicación semanal difundiendo noticias y sentipensares que visibilizan y anuncian un Mundo Saludable con Alegremia y Amistosofía
22 de Octubre de 2019
Nro. 297
Agradecemos al Pastor Aníbal Sicardi,
Director de Prensa Ecuménica/Ecupress, por compartir esta nota.
LA AMAZONÍA ES MUJER
“Es importante transmitir un mensaje claro en este Sínodo para aquellos que no nos conocen. Permítanse escucharnos, conocernos y sentir qué es la Amazonía, ya que esta región, más que un bioma es un espíritu”.
“La Amazonía es mujer, es el soplo de vida y el aliento de vida que dio el Padre Creador al servicio de la humanidad” declaró Anitalia Claxi Pijachi Kuyuedo a Vatican Newas, en el marco de los trabajos del Sínodo sobre la Amazonía.
Anitalia es la líder indígena representante del pueblo Okaina Witoto de la Amazonía Colombiana, uno de los 348 pueblos que viven en la selva, reitera que hablar de Amazonía “es hablar de una mujer”, porque “la Amazonía es mujer”.
Agrega que “Es importante transmitir un mensaje claro en este Sínodo para aquellos que no nos conocen, invitando a todos los que “vivan donde vivan y sean de donde sean”, a recordar que “todos y cada uno de nosotros somos Amazonía”.
“Si no nos conocen nunca entenderán nuestro mundo” sostuvo Anitalia, quien afirma que es un gran honor estar en este espacio sinodal, ya que a pesar de que la figura masculina predomina en estos trabajos, la Iglesia también reconoce su sentido espiritual de “madre”.
“Por eso es fundamental que aquí haya mujeres representando a sus pueblos, de varias edades y con distintas experiencias de vida”, añade Pijachi Kuyuedo; subrayando que la esencia de la Amazonía es femenina, “es una mujer creada por Dios para dar vida”.
“Permítanse honrar a los pueblos amazónicos, conocernos, no cultiven ideas o pensamientos superficiales y vacíos sobre nosotros. Si no nos conocen nunca van a poder entender nuestro mundo y nuestro universo cosmogónico”, concluye Anitalia.